Salernitana – Bolonia

Anticipamos goles tanto del Salernitana como del Bolonia

El Salernitana está en alza tras el nombramiento de Paolo Sousa. Los Caballitos de Mar han sumado cinco puntos en sus tres últimos partidos, con el último resultado incluso sensacional. La última vez, vencieron al AC Milan en San Siro. La Salernitana se metió de nuevo en el partido tras perder la primera parte, con un gol de Giroud en el minuto 61 contra Dia. No es el resultado más lógico (dadas las estadísticas), pero subraya las mejoras cualitativas en el juego del equipo. Antes de eso, los hombres de Sousa habían repartido puntos con la Sampdoria en un partido seco y goleado al Monza (3-0). Estos últimos éxitos permiten a los Caballitos de Mar mantenerse a una distancia razonable de la zona de descenso. Sin embargo, tras tres derrotas consecutivas ante Empoli y Lecce, la distancia se ha reducido al mínimo. El Bolonia está rindiendo bastante bien. Tras una sensacional victoria contra el Inter, el equipo perdió 1-0 ante el Torino. En el encuentro de la semana pasada, los Rossoblu se repartieron los puntos con el Lazio en un seco encuentro. Es cierto que los romanos acusaron el cansancio de la competición europea, pero los hombres de Motta mostraron una gran regularidad y consiguieron privar a las Águilas de todas sus bazas. En el lado negativo, el rendimiento del Bolonia en los últimos partidos ha sido pobre. El Bolonia sólo ha marcado tres goles en este tramo, y ante este panorama surge una pregunta lógica: ¿por qué Motta no alinea a Arnautovic? Una vez más, sin embargo, asegura a todo el mundo que no tiene ningún conflicto con el guardameta austriaco. Marko se está recuperando de su lesión. Es probable que Orsolini participe en este encuentro. Los Rossoblu son novenos en la tabla gracias a sus últimos resultados. En teoría, el equipo puede escalar hasta la sexta plaza, ya que está a sólo seis puntos. En el contexto de la apuesta, cabe destacar que en los tres últimos partidos entre ambos equipos se han visto goles por parte de los dos conjuntos. En el partido de ida, por ejemplo, el marcador fue de 1-1. En general, si los adversarios tienen la misma fuerza, el partido puede acabar con el mismo resultado. Como mínimo, no deberían quedar ceros en el marcador.